Si una persona cree que vacunarse hoy en d铆a es una dura prueba, deber铆a conocer la versi贸n del siglo XVIII.
Despu茅s de que te pusieran en el brazo pus de un hervor de viruela, seguir铆an tres semanas de fiebre, sudores, escalofr铆os, sangrado y purgas con medicinas peligrosas, acompa帽adas de himnos, oraciones y sermones sobre el fuego del infierno recitados por r铆gidos predicadores.
En general, con la vacuna de la viruela, el proceso funcion贸 y las personas lo prefirieron a soportar la viruela “natural”, que mat贸 a cerca de un tercio de quienes la contrajeron. Los pacientes a menudo estaban agradecidos por la prueba de inmunizaci贸n, una vez que terminaba, claro.
鈥淧or lo tanto, mediante la Misericordia de Dios, he sido preservado a trav茅s del Moquillo de la Viruela鈥, escribi贸 un tal Peter Thatcher en 1764, despu茅s de someterse al proceso en un hospital de vacunaci贸n de Boston. “Muchos y atroces han sido mis pecados, pero espero que sean lavados”.
Hoy, una vez m谩s, los estadounidenses est谩n sorprendentemente dispuestos, incluso ansiosos, de sufrir un poco por la recompensa de la inmunidad contra un virus que ha puesto al mundo al borde del abismo.
Aproximadamente la mitad de los vacunados con las dos dosis de Moderna o Pfizer-BioNTech, y en particular las mujeres, experimentan molestias: desde brazos calientes y doloridos hasta escalofr铆os, dolor de cabeza, fiebre y agotamiento. A veces se jactan de los s铆ntomas. A menudo les dan la bienvenida.
La sospecha sobre lo que conten铆an las inyecciones creci贸 en la mente de Patricia Mandatori, una inmigrante argentina en Los 脕ngeles, cuando apenas sinti贸 la aguja penetrando en su brazo despu茅s de su primera dosis de la vacuna de Moderna, en una cita de marzo.
Sin embargo, un d铆a despu茅s, con satisfacci贸n, 鈥渟inti贸 como si me atropellara un cami贸n鈥, dijo Mandatori. 鈥淐uando comenc茅 a sentirme mal, dije: ‘S铆, me vacunaron’. Estaba feliz. Me sent铆 aliviada”.
Si bien los s铆ntomas muestran que el sistema inmune est谩 respondiendo a la vacuna de una manera que proteger谩 contra la enfermedad, la evidencia de los ensayos cl铆nicos mostr贸 que las personas con pocos o ning煤n s铆ntoma tambi茅n estaban protegidas. No te sientas mal si no te siente mal, dicen expertos.
“Esta es la primera vacuna en la historia en la que alguien se ha quejado de no tener s铆ntomas”, dijo el , inmun贸logo y director del Centro de Educaci贸n sobre Vacunas del Hospital Infantil de Philadelphia.
Existe alguna evidencia de una respuesta inmune m谩s fuerte en las personas m谩s j贸venes y en las que se enferman cuando se vacunan. Un peque帽o estudio de la Universidad de Pennsylvania mostr贸 que las personas que informaron efectos secundarios sist茅micos como fiebre, escalofr铆os y dolor de cabeza pueden haber tenido niveles algo m谩s altos de anticuerpos. El gran ensayo de la vacuna de Pfizer mostr贸 la misma tendencia en pacientes m谩s j贸venes.
Pero eso no significa que las personas que no reaccionan severamente a la vacuna est茅n menos protegidas, explic贸 la , experta en enfermedades infecciosas e inmunolog铆a del envejecimiento en la Escuela de Medicina David Geffen de la UCLA.
Si bien los s铆ntomas de la enfermedad son, sin duda, parte de la respuesta inmune, la respuesta inmune que cuenta es la protecci贸n, dijo. “Eso se conserva en todos los grupos de edad y es probable que sea independiente de si la persona tuvo o no efectos secundarios locales o sist茅micos”.
Se cree que las respuestas del sistema inmune que producen s铆ntomas posteriores a la vacunaci贸n son desencadenadas por prote铆nas llamadas receptores tipo toll, que residen en ciertas c茅lulas inmunitarias. Estos receptores son en las personas mayores.
Pero otras partes de tu sistema inmune est谩n respondiendo m谩s gradualmente a la vacuna al crear los tipos espec铆ficos de c茅lulas necesarias para proteger contra el coronavirus. Estas son las llamadas 鈥渃茅lulas B de memoria鈥, que producen anticuerpos para atacar el virus, y las “c茅lulas T asesinas” que rastrean y destruyen las c茅lulas infectadas por el virus.
Muchas otras vacunas, incluidas las que previenen la hepatitis B y la neumon铆a bacteriana, son muy eficaces y tienen perfiles de efectos secundarios relativamente leves, apunt贸 Schaenman.
Si se tiene una reacci贸n fuerte a la vacuna 鈥渆s una cuesti贸n interesante pero, en cierto sentido, no es vital鈥, dijo el , profesor de enfermedades infecciosas en el Centro M茅dico de la Universidad de Vanderbilt. En resumen, dijo: “No hay que preocuparse por eso”.
Hubo un tiempo en que los m茅dicos recetaban aceite de h铆gado de bacalao y la gente pensaba que los medicamentos ten铆an que tener mal sabor para ser eficaces.
Las personas que se enferman despu茅s de la vacunaci贸n contra covid “sienten que hemos tenido un poco de sufrimiento, que hemos enfrentado al enemigo”, dijo Schaenman (que tuvo un poco de fiebre). “Cuando no tienen los efectos secundarios, sienten que les han robado la experiencia鈥.
A煤n as铆, los efectos secundarios pueden ser una se帽al esperanzadora, especialmente cuando terminan, dijo Eddie Anderson, l铆der de la Iglesia Cristiana McCarty Memorial, quien ha liderado los esfuerzos para vacunar a los feligreses de raza negra de Los 脕ngeles. Los ayuda a atravesar el per铆odo dif铆cil record谩ndoles los alegres reencuentros con hijos y nietos que ser谩n posibles despu茅s de la vacunaci贸n.
“Soy un pastor cristiano”, dijo. 鈥淟es digo: ‘Si superan el dolor y la incomodidad, la curaci贸n est谩 del otro lado. Puedes volver a ser completamente humano”.
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